El sexo oral es bueno, pero a veces te preguntas si no podría ser aún mejor. Sin presiones (no hay diploma para la mejor felación), aquí tienes 7 pequeños trucos de oro para darle más placer a tu pareja.
¡Nos gusta eso!
Es dándose placer a sí mismo que se lo ofreceremos a nuestra pareja. Por qué ? Porque si la felación nos excita, él lo sentirá y se excitará aún más. En otras palabras, es la historia de un círculo virtuoso. Sin embargo, recuerda que es inútil forzarte: si prefieres hacer una felación enfurruñada, entonces enfurruñala. Y si queremos aprender a amarlo entonces tomamos la visión opuesta de lo que nos desagrada: ¿demasiado sumiso? El hombre se acuesta, nos ponemos encima de él. ¿Demasiado egoísta? Ofrecemos un 69 para un placer compartido...
salivamos
A los genitales les encanta... la humedad. ¡Factor de emoción que no debe pasarse por alto! Tan discretamente, salivamos una y otra vez. O bien, optamos por un lubricante, ¡efecto garantizado!
Abandonamos los gestos mecánicos
La mamada no es cuestión de "entro, salgo", sino te aburres rápidamente. Entonces masturbamos a nuestra pareja con la mano, antes de volver a meter la boca, y así sucesivamente. También puedes divertirte lamiendo su pene, desde la raíz hasta el glande. Y luego, a veces vamos rápido, a veces bajamos la velocidad… Cambiando de ritmo y jugando, ambos nos divertimos.
Guardamos nuestros dientes
Un consejo, una línea: ¡cuidado con los dientes feos que pueden doler!
¡Traemos el cambio!
¿Qué tal si vamos en el sofá o en la ducha? Estamos arruinados para pagar un apartamento, aprovechemos la oportunidad para redescubrirlo desde un nuevo ángulo. Lo mismo ocurre con las posiciones: a veces sumisos, a veces dominantes, ¡nos divertimos variando las acrobacias para refrescar un poco la felación!
Miramos a nuestro compañero
Todo depende de nuestro grado de timidez y de la luz que haya en la habitación (sí porque en la oscuridad, siempre podemos mirarnos, no nos veremos mucho) pero un poco de picardía o mirada romántica, sienta bien... !